Segundo año que me acerco a Lierganes, con motivo de la martxa que se organiza, y que atraviesa el Territorio Meratxo en su parte central, con la temida subida al Cerecillo, despues de haber pasado por los Pozos de Noja y su interminable subida de algo mas de 9km.
El año pasado fui leyenda en su primera edicion (Ver aqui), y este año queria volver a repetir haber que tal se daba, puesto que el año pasado el tiempo fue pesimo. Este año, con la carrera un mes antes que el año pasado, pues ha sido pauperrimo, con unas condiciones climatologicas infernales, con viento, frio, barro, e incluso nieve en algunos puntos, vamos, que en vez de mejorar con respecto al año anterior, ha empeorado, haciendo mas duro, si cabe, el recorrido.
TRACK: 2017.03.25 II Martxa BTT Lierganes La Leyenda (neutralizado)
Este año salgo de casa diluviando a mas no poder desde la noche anterior, y asi todo el camino que tengo. En Lierganes, cuando llego la cosa no cambia. Tengo suerte y aparco al lado de las duchas, menos mal. Me cambio un poco y voy a por el dorsal y la bolsa del corredor. Gracias al paraguas, porque sino ya estaria encharcado. Llego a la salida, todo el mundo corriendo o debajo los balcones o dentro del edificio de los dorsales. Recojo la bolsa del corredor, me dan el carnet de federado por un dia y vuelvo de nuevo al coche. No voy a entrar en si esta bien o no, pero quizá sugerir meter mas bulto en la bolsa a parte del buff (que me vino bien para despues de terminar, ya que no tenia otro seco y lo tuve que usar) y los flyers de las carreras y demas. Algun patrocinador con productos de la zona, un sobado pasiego, una barrita, lo dejo a modo de sugerencia.
Ya volviendo al coche me encuentro con DaVizin, el Territorio Meracho en estado puro. Me acompaña y me ayuda a preparar la bici y resto de bartulos. Charlamos un poco y enseguida voy donde el «peke» que esta con los amigos. Me dice si necesito algo que me lo lleva al Cerecillo, pero este año salgo con bien de capas y de ropa de abrigo. Ademas este año si que llevo la mochila Evoc cc6L, que la tenia por casa sin usar, pero que de vez en cuando viene bien llevar, y hoy es uno de esos dias que mas vale llevar la mochila y parecer globero ( a parte de serlo siempre) que joderse de frio como el año pasado por no llevarla.
En la salida, sigue lloviendo. Este año en vez de llevar el chubasquerillo de la bici, me he decidido por traer el Marmot Essence Jkt que habitualmente uso para el trail, pero que lo pille de cara a darle mas usos, y hoy va a tener trabajo. Ademas, estreno de guardabarros delantero y de guantes para las condiciones mas extremas, que proximamente dejaré documentado en el blog. Comentar tambien que dias antes a la martxa, dejé la bicicleta en Ormaetxea Amurrio para una puesta a punto, y la verdad, que al igual que en otras ocasiones, mereció la pena, solo por el hecho de no tener que bajarme porque la cadenilla estuviera mal engrasada, como era el caso de mucho participantes.
La salida, finalmente llega, y como en la edicion anterior, salida neutralizada por el pueblo, una vuelta y despues salimos hacia el primer coloso del dia, que aunque en el perfil no parece gran cosa, tiene escondidos ciertos repechos y rampas, que con el barro de hoy, nos hacen descabalgar a muchos de nuestras bikes. En un punto de la subida, nos desvian del recorrido del año pasado y nos mandan hacia Llanos sin pasar por Pamanes y la zona de Cabarceno, por la que fuimos.
Llegamos, que no es poco a Llanos, paradita de rigor al avituallamiento, comer un poco, beber otro poco, una meadita calentita y a empezar con el primer escalon gordo del dia. Mencionar que este año habia un chico con una hidrolimpiadora sin parar, dejando las bicis de los participantes impecables; me pareció un buen detalle, puesto que el año pasado no en todos los puntos habia.
La subida a los Pozos de Noja es larga y agorera. Cansa mas mentalmente que fisicamente, mientras vas pensando en sus algo mas de 9km de subida antes de caer hacia el Valle de Miera. Los primeros compases se dan con alegria en el cuerpo, mientras por pista tendida vamos ganando altura sin tampoco tratarnos mal el desnivel. Pero antes de llegar a los que son los pozos, un pequeño cortafuegos y una pista de grijo con 4 curvas que nos van a poner a tono antes de llegar al siguiente avituallamiento, el liquido que hay a mitad de subida, se supone.
Es aqui donde nos pasa «el cierre» y nos comenta que nos espera. No sabia yo que habia cierre, no lo he visto en ningun punto del reglamento, aunque si que hay un corte en Mirones a las 13:00. No le doy importancia. Paro un momento a beber liquido, y no pierdo mucho el tiempo, que me quedo frio….Continuamos subiendo, ahora por pista de barro y expuestos a los elementos. Estamos en la zona de los Pozos y sus campas, y el agua va y viene por todos lados.
Un poco mas de desnivel y tras echar el pie al barro, ganamos los ultimos metros exigente y entramos en la pista horizontal que aun asi, poco a poco va picando. Creo recordar que el año pasado aqui llovia a mares y soplaba un viento atroz; hoy, nos cae aguanieve, algun copo de nieve, lluvia, frio, viento…. vamos que parecido o peor climatologia. Recuerdo que los pozos que vamos cruzando en el camino, en la edicion anterior tenian menor volumen de agua, y en alguno casi dejo de ver la rueda por un momeno. Cruzada esta zona, llegamos a una curva en paella, en zona de canales de agua y que para mi no es ciclable. Pasado esto, comenzamos el descenso a Miera, y mas tarde llegar a Mirones.
Los guantes Sealskinz se van portando bien, pero en la bajanda se empieza a notar, que van petaditos de agua, y al final, acabo sufriendo el duro pinchazo del frio en las extremidades superiores. No pasa nada, este año he traido algo de dinero en caso de que no haya nada caliente en el avituallamiento, asi que igual me ve el del bar de Mirones, pero ya lo veremos.
Paso por Miera helado de frio, y veo que al lado de un edificio blanco se concentran lo de 25-30 bicis. Supongo que es algun puesto, pero mas tarde en el Facebook veo que es el bar, y que en vista a la gran presencia de bikers afectados de hipotermias y frio, han decidido hacer un buen putxero de caldo mientras vienen las asistencias a ir bajando al personal hasta la meta. Continuo y al igual que el año anterior, para llegar a Mirones tomamos la PR C-77, que a traves de un precioso sendero-pista a media altura en el valle, nos va llevando poco a poco hasta La Cantolla, en donde DaVIzin y el resto de gente que hay en el avituallamiento, no dan credito a lo que ven sus ojos: llega Arkaitz!!!!!! Aibalaostia!!!!!!!! Se ve que no daban un duro por que llegara viendo
el panorama.
Lo primero que me ofrecen creo que ya me cambia la cara: CHOCOLATE CALIENTE!!!!! Joder, con este frio no tengo ni «churro» para mojar, pero por Dios, algo caliente. Venia pensando que si no habia nada caliente, pararia en el bar de mirones a tomar un cafe con leche. Aun asi, una autentica gozada poder calentar el cuerpo. No tengo prisa, asi que, bebo hasta 3 vasos de chocolate. Me limpian la bici (detallazo de David) me atienden genial, que no me falte de nada, ni a mi ni a los que vienen detras (unos pocos). Al final arranco hacia el Cerecillo o lo que se conoce como Infierno Meracho, perooooooo
A 50m de haber salido la organizacion me dice a mi y a los que venian detras que segun bajemos a la carretera que tiremos para Lierganes por carretera, que se neutraliza el tema y que si seguimos el recorrido original que es bajo nuestra responsabilidad y sin dorsal. Lo primero que pienso es, JODER!!!! Que putada, no
s han cortado. Lo segundo es, «toma el dorsal que voy», y lo tercero y ultimo es «si yo organizara la martxa estaria tranquilo aunque fueran bajo su responsabilidad??? NO, asi que subo de nuevo y otro chocolate al pecho. Al final un par de tragos de vino, y suave suave por la carretera que separa Mirones de Lierganes, y pensando, que de putin bolo, que enseguida voy para la ducha, y que es una pena no haber podido completar el recorrido.
Asi que, ya en Lierganes, pasar por meta a que tomen nota de que he llegado, y raudo y veloz para el coche a cambiarme. Un avance que traia era que la bici estaba limpia, asi que al portabicis, y rapido a la ducha. Al entrar en el vestuario, parece que volvemos a correr, hay un pastizal de barro que hay que andar con mucho cuidado al terminar la misma de no volverte a poner hecho un santocristo.
Tengo el ticket de la comida que entra con la inscripcion, pero habia quedado con los hermanos Martin Gomez para comer, y luego ya volver poco a poco de nuevo a la realidad. Damos buena cuenta de unas pizzas, un cafe largo, y de seguido cada uno para su lado a sus labores.
Un placer volver a disfrutar del territorio meracho y los aledaños, aunque no haya podido ser «leyenda oficial». Dar las gracias a Bizkairoute por los guantes, y a Ormaetxea por la mecanica, y a toda esa gente que sigue el blog, pero tambien a los que hoy se han dado cita en los diferentes puntos del recorrido a animar; solo el estar ahi fuera era de admiracion.
Haber si en la proxima por fin compran un poco sol los de la organizacion, y podemos sufrir la agonia de los pozos y el infierno meracho bajo un sol abrasador y deshidratador